Esta película documental está dividida en 20 capítulos, cada uno precedido por un epígrafe. Presenta la servidumbre moderna como una servidumbre voluntaria y describe la apropiación del territorio por parte del capitalismo, a degradación del medio ambiente y de los alimentos, la esencia del trabajo alienado, la ilusión del parlamentarismo y la omnipresencia de las imágenes y de los divertimientos, entre otras cosas. Desarrolla el concepto de “sistema totalitario mercantil” que se define como la colonización de todos los aspectos de la vida social e íntima y también de la totalidad del espacio por parte de la mercancía. Constituye, pues, la aspiración realizada de todo sistema totalitario: que nada escape a su influencia. Paralelamente, para ocultar nuestra condición servil y la demencia de la organización social en su conjunto, el sistema totalitario mercantil ha puesto en marcha toda la parafernalia de la mistificación. La última secuencia de la película es un llamado a la rebelión y a la insurrección contra la dominación presente.
Esta obra es considerada la primera película en español estrenada que fue financiada mediante un modelo de crowdfunding o financiación en masa.2 Se destacó también por su modelo de proyección distribuido que permitió su estreno en simultáneo en 151 salas en 119 ciudades de 13 países en donde fue vista por más de 18 000 espectadores.3 4 A un año de su estreno se estima que la película fue reproducida y descargada más de 10 millones de veces y se registraron casi 900 proyecciones independientes en más de 30 países